lunes, 14 de marzo de 2016

"EL MISTERIO DE JUSTICIA": EL CASO DEL CERTIFICADO DE PENALES.


Hoy os traigo un caso paranormal que nos llega desde el mismo centro de la capital. A pocos metros de Sol, en la Oficina Central de Atención al Ciudadano encontramos uno de los misterios más recientes de la historia moderna.
Y allí me dirigí esta misma mañana, cual Iker Jimenez, a intentar desentrañar este expediente X.



9:30 de la mañana del lunes 14 de Marzo de 2016

Una cola enorme inunda la Calle de la Bolsa. Gentes de todos los rincones de la capital se agolpan a las puertas del nº 8 de la citada calle. Mucha gente sin información y sin nadie que la proporcione. Trabajadoras de la limpieza, conductores de autobús,monitoras de comedor. Una macedonia de lo más variopinta en busca de una certificación negativa del Registro Central de delincuentes sexuales.
El fenómeno se extiende a todo tipo de gente que "supuestamente" (y digo supuestamente porque las empresas se lo están pasando por el forro) "tenga contacto directo y habitual con menores...
En la puerta de la oficina un expositor con formularios como el que adjunto (gracias Iuris!) a tutiplen para que vayas rellenando en lo que tarda la cola en llegar a la meta. Que no es que ahorres tiempo ni mucho menos, porque imaginaos la situación de toda esta gente intentando rellenar el formulario sin bolígrafo o sin poder apoyarse en sitio alguno...pero queda bonito dejarlo al alcance para que lo vayas leyendo.


Una senda marcada por pivotes de plástico y una ancha cinta te indica el camino que has de seguir, como si del camino de baldosas amarillas se tratara, para llegar al mágico país de Oz. 
Pero oh! sorpresa! al final de la cinta no está la bruja buena del Norte, tampoco la bruja mala del Sur. Está la Bruja Pringada de la Central (y conste que lo digo con cariño): una señora funcionaria entrada en años, sentada en un pupitre (no se puede considerar ni un escritorio común) que te pide el DNI, sella la solicitud y las va metiendo en una cutre carpetilla de cartón donde se amontonan otras 200 de personas que han pasado por delante de ti.

Dejando a un lado los datos inverosímiles que te preguntan, como el nombre de tu padre o de tu madre (sin especificar si son datos obligatorios o si van dirigidos solo a los menores de edad) me dispongo a explicaos brevemente, el proceso de obtención del certificado: Una vez llega al registro (de ahora en adelante "la carpetilla") se tramita la solicitud y al cabo de unos días* recibes un mensaje via SMS al movil que has indicado con un código con el que descargarlo en cualquier dispositivo digital. CHIM-PUM.

*días: dicese de un periodo entre 48 y 372 horas que la mujer no ha sabido aclararme debido a que "antes se recibía entre 2 y 3 días, pero ahora con la saturación que tenemos es imposible decírtelo con precisión" (palabras exactas).
¿Por qué llamo Bruja Pringada a esta pobre mujer?
Uno, por seguir con el cuento y dos porque es la que, sin comerlo ni beberlo se come las quejas y responde a las dudas que ni el BOE deja claras. Y lo hace como puede, con paciencia y buenas maneras.
Preguntas como: ¿Por qué yo pague 3,70 de tasas y ahora es gratis? o ¿y ésto no lo puede hacer la empresa?. Y otras como ¿cuanto tardan en enviarte el mensajito al móvil? que la señora contesta y sortea al mismo tiempo como puede.

¿Por qué viene todo esto? Por una mala praxis, como en tantas ocasiones. Por una falta de medios descomunal y por querer hacer las cosas deprisa y corriendo sin que ni los legisladores tengan claro el "por qué" de las cosas.

ACLARACIONES:

Antes del 1 de Marzo, lo que se pedía era el "Certificado de Antecedentes Penales", que yo entiendo, atenta contra la intimidad de la persona, porque quitando de delitos sexuales contra menores, a mi empresa no le interesa, ni tiene porque saber, si yo fui detenido en una manifestación o si me pillaron mangando Phoskitos en el Carrefour. Por cierto, se encargaron de meter prisa a empresas y trabajadores (sospechoso) para que lo hicieran nada más empezar el 2016.
A esto, sumadle:
1.- Que la expedición de dicho certificado si tiene una adherida una tasa de 3,70 €  
-Oh! eso no es dinero!
Bueno, pero es MI dinero. 
2.-Que el reglamento que desarrolla dicha ley (esto lo se por mi querida @iurisfriki) no especifica quien debe asumir el coste. Cosa que las queridas empresas de este país han aprovechado para lavarse las manos y hacer que te la pagues tú. Además, de esta forma debía renovarse cada 4 meses (esos son 3 veces al año, que sumarían 11, 10 € ya.) y para trabajar se requería el original (si trabajas en más de 1 estás jodido, te tocaba pagar el doble, o el triple!)

3.-Que ahora, después de aclarar un poco la situación (al menos se ha especificado la naturaleza del delito) te digan con cierto recochineo, que puedes pedir la devolución de la tasa si la pagaste anteriormente. (Con sinceridad, ¿quién va a perder el tiempo ahora rellenando otro formulario (o 2, o 3) y tirando media mañana, para recuperar 4 miseros euros???)
El certificado del que os hablo es totalmente GRATUITO. Que no os vuelvan a engañar después de todo. Y es el válido.

Y ahora, de nuevo, como ciudadano me acuerdo que esa querida Brigada #T y de su lucha. Y me pregunto yo también, ¿¿¿ dónde va el dinero de esa tasa que nos han colado a los pobres curritos???
Supongo que al mismo sitio donde acabaron las tasas judiciales: Al limbo.

Twit gracioso del Ministerio que posteriormente reconoció, contestando a varios parlamentarios, que no tenía ni pajolera idea de donde leches había ido a parar lo recaudado.
Y hasta aquí les puedo contar de este inquietante suceso del que fueron testigos innumerables personas y que todavía tiene muchas lagunas por resolver. 
SERINDIPIA!


Esfuércense por hacer las cosas como se deben. El ciudadano de a pie se lo reconocerá enormemente. 

Por cierto, AQUÍ tenéis la info completa (o no, vete tu a saber) sobre dicho certificado que todos aquellos que trabajéis en contacto con menores debéis poseer a partir de ya.


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